Desconexión en vacaciones
Nos dicen los expertos que 3 de cada 4 españoles/as no logran desconectar totalmente en vacaciones. De hecho, el 35% desconecta del trabajo, pero no de Internet y las redes sociales, cifra que se dispara al 70% en el caso de los menores de 30 años.
La desconexión en vacaciones nos ayuda a descansar física y mentalmente, y facilita que volvamos al trabajo más motivados.
La consecuencia principal de no hacerlo suele ser el agotamiento físico y mental que, en algunos casos, propicia el desarrollo de problemas psicológicos. Apartar la mente del trabajo durante las vacaciones es esencial para evitar algunas consecuencias indeseables, como el estrés, la ansiedad y el insomnio. Un problema que afecta especialmente a los puestos directivos, autónomos o aquellos con un negocio propio, que son los que más sufren estas ataduras invisibles.
Sin embargo, no siempre son las responsabilidades, sino la dependencia de internet y las RRSS, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Cada vez más, las vacaciones marcan el punto de inflexión en el que la persona es plenamente consciente de su adicción a dispositivos electrónicos y redes sociales. El hecho de querer compartir en ellas los momentos de ocio nos centra en cómo narrar lo que hacemos, en lugar de disfrutar de lo que tenemos a nuestro alrededor.
Desde Recursos Humanos damos unos consejos para conseguir que esa desconexión sea más eficaz:
- Aunque no madruguemos, debemos intentar proponernos rutinas que nos mantengan activos.
- Que no te domine tu móvil: quita el sonido de las notificaciones, sepárate de él siempre que sea posible, y que no te robe tiempo de calidad y socialización.
- Evita el sedentarismo porque, aunque el verano sea un período de descanso, un nivel de inactividad elevado tampoco es bueno.
- Intenta cerrar asuntos pendientes antes de iniciar el periodo de descanso; si tienes que atender el trabajo, intenta acotarlo en un tiempo diario del que luego desconectes.
- Evita las jornadas maratonianas y planificar demasiado en los viajes. Intentar hacer en vacaciones todo lo que no hiciste el resto del año estresa y agota.
- Pasa tiempo con la gente a la que quieres, y trata de cuidar las relaciones que, a veces, sin querer, se descuidan porque no tenemos mucho tiempo.
- Deja algún rato para no hacer nada y luego llénalo con aquello que te apetezca en ese momento.
- Hazte buenos propósitos, especialmente aquellos que tenías un poquito olvidados, y procura mantenerlos el resto del año.
Dediquemos nuestros días de descanso a cargar pilas y retomar nuestras tareas con fuerza. ¡Felices vacaciones!
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